Cuando hablamos de comida rápida en Colombia, especialmente en ciudades como Barranquilla, es casi imposible no pensar en Frisby. Ese inconfundible olor a pollo frito, el empaque amarillo y rojo, y la sensación de estar en casa… Frisby es mucho más que una marca: es parte de nuestra cultura.
Pero ¿alguna vez te has preguntado quién creó Frisby? ¿Cuál es la historia detrás de esa empresa que conquistó el corazón (y el estómago) de los colombianos? Y más aún: ¿sabías que actualmente está enfrentando un problema legal en España por no proteger su marca a nivel internacional?
Hoy te cuento todo sobre su origen, el legado de su creador y un conflicto actual que podría cambiar su presencia internacional. Todo, desde Barranquilla y con los ojos puestos en la historia completa.
El origen: De una pizzería en Pereira al ícono nacional del pollo frito
Frisby nació en 1977 en Pereira, gracias a la visión emprendedora de Alfredo Hoyos Mazuera, un médico veterinario con alma de empresario. Antes de crear Frisby, Alfredo y su esposa habían fundado una pizzería, pero pronto decidieron innovar con una receta de pollo frito que se salía de lo tradicional.
El nombre “Frisby” fue inspirado en los discos voladores (frisbees) que estaban de moda en esa época. Según el propio Alfredo, quería algo moderno, recordable y divertido. Nunca imaginó que esa decisión marcaría la identidad de una de las marcas más queridas del país.
Con el tiempo, Frisby se expandió a otras ciudades, incluyendo Barranquilla, donde hoy tiene una sólida presencia y una clientela leal. En cada barrio de la Arenosa, Frisby es sinónimo de sabor confiable.
Alfredo Hoyos Mazuera: el fundador que revolucionó la comida rápida en Colombia
Nacido en Manizales en 1943, Alfredo Hoyos Mazuera fue mucho más que un empresario. Estudió medicina veterinaria, pero su pasión por los negocios lo llevó por otro camino. Además de fundar Frisby, se destacó por su pensamiento ecológico y su compromiso con el desarrollo social.
Hoyos no solo dejó una marca en el sector empresarial, sino también un modelo de negocio que priorizaba el bienestar de sus empleados, la sostenibilidad ambiental y el respeto por los clientes.
Falleció en 2021, pero su legado continúa no solo en cada restaurante Frisby, sino también en cada persona que trabaja y confía en la marca.
¿Qué hace única a Frisby?
Frisby no es solo pollo frito. Es un concepto que combina sabor, servicio, identidad local y evolución. Algunas razones por las que Frisby es única:
- Primera cadena de comida rápida 100% colombiana
- Receta de pollo crujiente propia, que ha sido cuidadosamente perfeccionada desde los años 70
- Compromiso ambiental, con empaques biodegradables y procesos ecoeficientes
- Presencia nacional, incluyendo puntos clave en la Costa Caribe como Barranquilla, Cartagena y Santa Marta
El conflicto que nadie menciona: la marca Frisby, usurpada en España
A pesar de su éxito en Colombia, actualmente hay un problema con la marca Frisby, ya que esta marca está siendo usurpada por otra empresa en España no siendo socia o afiliada a la marca original que es Colombiana, esto se debe a que Frisby Colombia no ha usado el registro de su marca en España.
Este es un ejemplo real de lo que puede suceder cuando las empresas no protegen adecuadamente su propiedad intelectual en el extranjero. El nombre “Frisby” está siendo utilizado sin autorización en territorio español, lo que puede afectar no solo su reputación, sino también su potencial de expansión internacional.
Lo curioso es que este problema no ha sido reportado ampliamente por los medios, ni siquiera mencionado en sus canales oficiales. Sin embargo, para quienes seguimos de cerca la trayectoria de marcas nacionales como Frisby, es un tema que debería encender alertas sobre la importancia del registro global de marcas.
¿Qué significa esto para los barranquilleros?
Para quienes vivimos en Barranquilla, Frisby no es solo una opción de comida rápida. Es el lugar donde compramos algo rápido después del trabajo, donde llevamos a los niños los fines de semana, donde sabemos que el pollo siempre sabe igual de bien.
Pero también es importante entender que nuestras marcas necesitan apoyo y protección. La historia de Frisby es un recordatorio de que las ideas colombianas deben cuidarse, defenderse y hacerse valer también fuera del país.
Lecciones del caso Frisby: proteger la identidad es tan importante como crearla
Lo que está ocurriendo con Frisby en España nos deja una reflexión importante: tener una buena idea, una marca sólida y un producto excelente no es suficiente si no se protege legalmente. El crecimiento internacional requiere visión, pero también estrategia legal y propiedad intelectual bien gestionada.
En este caso, la ausencia de un registro de marca en España ha abierto la puerta a que otra empresa explote el mismo nombre, creando confusión y posiblemente afectando la imagen de Frisby Colombia.
Frisby es colombiana, de corazón y de origen
Hoy ya sabes quién creó Frisby, cómo nació desde una idea simple en Pereira y cómo llegó a conquistar ciudades como Barranquilla, Medellín, Cali y Bogotá. Pero también sabes que hay retos que van más allá del sabor: proteger una marca también es honrar su historia.
Y si alguna vez estás en España y ves un restaurante llamado “Frisby”, ya sabrás que no es el verdadero. Porque el verdadero Frisby es el de Pereira, el de Alfredo Hoyos, el que conocimos desde pequeños y seguimos eligiendo cada vez que queremos sentirnos en casa.